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La depuradora de Guadalhorce, gestionada por Emasa, suministra agua de refrigeración a una central de ciclo combinado. El tratamiento terciario del agua precisa de una desinfección. El dióxido de cloro ha demostrado ser un desinfectante eficaz y adecuado para este uso.
Dióxido de cloro en la desinfección de agua para torres de refrigeración
La Depuradora de Guadalhorce es la mayor de las tres estaciones depuradoras de aguas de Málaga. Se trata de una depuradora convencional con tratamiento biológico por medio de fangos activos. La línea de fangos dispone de digestión anaeróbica y deshidratación mecánica por centrífugas de alto rendimiento. También dispone de secado térmico de fangos de baja temperatura, con una capacidad de evaporación de 7000 l/h, con una cogeneración asociada de 10 MW de potencia eléctrica que funciona con gas natural y el biogás procedente de la digestión. Como elementos diferenciales de esta instalación, son de destacar la configuración rectangular de los decantadores primarios y secundarios, el espesamiento de los fangos biológicos por medio de centrífugas y la disposición de un tanque de laminación previo al tratamiento biológico. En la Figura 1 puede apreciarse una vista general de la instalación.
El tratamiento terciario ha sido la última ampliación realizada. La construcción de la planta, que entró en servicio en junio de 2010, fue fruto del acuerdo entre Emasa y Gas Natural para el suministro del agua de refrigeración e industrial de la central de ciclo combinado del Parque Tecnológico de Málaga.
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