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En este artículo se describe cómo un medidor de caudal másico para sólidos, desarrollado recientemente, consigue una medición precisa sin el uso de accesorios mecánicos internos, al tiempo que emplea una técnica totalmente novedosa para la calibración y validación directa.
Hasta la actualidad, conseguir mediciones de caudal precisas de productos a granel ha representado un problema para la mayoría de instalaciones. La decisión que se ha tomado habitualmente ha sido la utilización de sistemas de pesaje o, en caso extremo, el diseño de procedimientos discontinuos. En muchos casos se ha confiados a los sistemas estáticos de peso o nivel la tarea de transformar su señal primaria, obtenida mediante los correspondientes transductores, en una medición en continúo por carga o descarga (Figura 1). Resulta evidente que existen muchos elementos y factores involucrados en la medida, por lo que el riesgo de inestabilidad se hace presente y obliga a un diseño y estudio de la aplicación lo más exhaustivo posible. Las opciones de medición de caudal directo, tales como, por ejemplo, placas de impacto, están expuestas no solo a desgastes mecánicos de sus accesorios internos, sino también a requerimiento de instalación que en muchos casos impedían su readaptación.