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Se ofrece en el presente artículo un análisis de las soluciones adoptadas dentro algunos procesos industriales (molturación, filtrado, transporte neumático, etc.), para combatir o aminorar las consecuencias de las explosiones en una instalación de estas característica. Los paneles de venteo y los apagallamas se formulan como soluciones, dependiendo de una u otra necesidad y posibilidad de ubicación de las mismas.
Una explosión no es más que una reacción de oxidación exotérmica que se propaga a muy alta velocidad, y las combustiones son un caso particular de estas. En toda combustión tenemos un combustible, el material que arde, y un comburente, normalmente oxigeno presente en la atmósfera (los explosivos utilizan el comburente de su propia composición química). Según esta definición, todo material que arde puede ser explosivo si se dan las circunstancias para que la combustión sea muy rápida.
Podemos esquematizar la reacción de combustión de un producto orgánico de la siguiente forma (Ec. 1).
C(n)H(2n+2) + (3n+1)/2O2 → (n)CO2 + (n+1)H2O + Calor (1)
El calor desprendido por esta reacción genera un incremento de temperatura del aire colindante y, utilizando la ley de los gases perfectos, el aumento de temperatura produce un aumento de presión.