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El pasado viernes 8 de mayo la compañía Repsol acometía una nueva etapa en su evolución empresarial, tras completar la compra de la compañía canadiense Talisman Energy, al tiempo que anunciaba el nuevo esquema organizativo de la multinacional.
De esta forma, con el informe favorable de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones, el Consejo de Administración de la firma, a propuesta de su presidente, Antonio Brufau, aprobaba un esquema organizativo acorde a la nueva situación derivada de la integración de Talisman.
En esta nueva organización, el consejero delegado, Josu Jon Imaz, asume todas las funciones ejecutivas, al tiempo que se refuerza la capacidad de gestión de los negocios. Presididos por Imaz, se constituyen tres órganos de máxima dirección: Comité Ejecutivo Corporativo, Comité Ejecutivo de E&P (Exploración y Producción), y Comité Ejecutivo de Downstream (Refino, Márketing, Química, GLP y, Trading y Gas&Power). Estos tres Comités tendrán responsabilidad plena en sus ámbitos de actuación.
El nuevo esquema organizativo se ha creado en base a tres objetivos principales, apuntan desde la compañía: alinear la estructura organizativa con la nueva cartera de activos de Repsol (se contempla un modelo único de compañía, que tiene en consideración la diversidad y características particulares de los negocios de E&P y Downstream); dar respuesta a la mayor escala global de Repsol (la integración de Talisman aporta a Repsol una amplia presencia geográfica, lo que hace necesario adecuar su estructura y el modelo operativo de las funciones corporativas), y potenciar la visión de Repsol como una compañía que apuesta por los negocios sostenibles a largo plazo, el progreso tecnológico y el bienestar social.
La adquisición de Talisman, firma canadiense con la que alcanzó a mediados del pasado mes de diciembre un acuerdo para la compra del 100% de sus acciones, por un monto estimado de 7.534 millones de euros, quedó revocada también en esta junta celebrada el 8 de mayo. Para sus responsables, “la operación transformará a Repsol en uno de los principales grupos energéticos privados del mundo, con mayor presencia en países de la OCDE, al incorporar reservas y producción en países de gran estabilidad geopolítica. Además, añade una extensa cartera exploratoria con activos productivos de alta calidad y potencial exploratorio, que aseguran el crecimiento de la actividad en los próximos años”.
Talisman Energy aportará a Repsol activos en producción de primera calidad y áreas de gran potencial exploratorio en Norteamérica (Canadá y Estados Unidos) y el Sudeste Asiático (Indonesia, Malasia y Vietnam), así como en Colombia y Noruega, entre otros países. La incorporación de Talisman incrementará la producción del Grupo Repsol un 76%, hasta los 680.000 barriles equivalentes de petróleo al día, y aumentará el volumen de reservas un 55%, hasta alcanzar los 2.353 millones de barriles equivalentes de petróleo. El grupo resultante estará presente en más de 50 países y superará los 27.000 empleados. Por su parte, la transacción “permite adelantar y superar significativamente los objetivos de crecimiento del área de Exploración y Producción (Upstream) de la compañía enmarcados en el Plan Estratégico 2012-2016, y consolida este negocio como el principal vector de crecimiento durante los próximos años. El capital empleado en esta área pasará a representar el 56% del total del Grupo, frente al 35% actual”, aseguraron en un comunicado desde Repsol en el momento del acuerdo.
Repsol obtuvo en el primer trimestre de 2015 un beneficio neto de 761 millones de euros, apoyado en la fortaleza de su modelo de negocio integrado (Upstream-Downstream), que le ha permitido minimizar la fuerte caída del precio del petróleo. Este resultado supone un descenso del 6% respecto a los 807 millones de euros registrados en el primer trimestre de 2014, periodo en el que se contabilizaron 299 millones de euros de resultados de operaciones interrumpidas, básicamente plusvalías por el cierre definitivo de la venta de activos de Gas Natural Licuado (GNL). El beneficio neto ajustado, que mide específicamente la marcha de los negocios, se situó en 928 millones de euros, lo que supone un aumento del 74% respecto al mismo periodo del año anterior. "La buena marcha de los negocios de refino y química y la fortaleza del dólar frente al euro compensaron el efecto que en los negocios de exploración y producción tuvo la brusca caída, del 50%, en el precio del crudo", apuntan desde Repsol.