Basf responde ante el accidente del complejo de Ludwigshafen

Según el relato presentado por la multinacional, días antes de producirse el suceso una empresa especializada en la construcción de tuberías realizó trabajos de montaje en una ruta de tuberías de etileno vaciada y asegurada. El objetivo de los trabajos de montaje era cambiar diversas partes de las tuberías como medida de mantenimiento preventiva. El 17 de octubre se iniciaba el fuego a las 11.30 de la mañana, cerca de los trabajos de montaje. Las investigaciones realizadas han demostrado la existencia de un corte en una tubería, realizado presuntamente con un disco de corte, producido por las tareas de mantenimiento que se estaban realizando en la tubería adyacente. El corte en la tubería no formaba parte de este trabajo. La tubería que sufrió un corte contenía una mezcla de butileno, cuya fuga provocó un incendió debido a las chispas ocasionadas por la sierra radial, añade el comunicado emitido por Basf.

Las tuberías afectadas incluyeron las utilizadas para etileno, propileno, butileno, gasolina de pirólisis y etilhexanol. El fuego fue extinguido el 17 de octubre a las 9.30 de la noche. Dos empleados miembros de la brigada de bomberos de Basf y un empleado de un buque cisterna fallecieron a consecuencia del accidente. Ocho personas resultaron heridas de gravedad; otras 22 resultaron heridas leves. Uno de los heridos leves ha sido dado de alta, añaden estas mismas fuentes

A causa del fuego, el suministro de materia prima de los steamcrackers tuvo que ser interrumpida; otras plantas de producción de Verbund, especialmente las que utilizan etileno y propileno en su cadena de valor, pararon o redujeron su producción. Algunas plantas pudieron continuar produciendo al utilizar los stocks de materia prima existente. Varias plantas, entre ellas los steamcrackers, han empezado de nuevo su producción. Según informan desde Basf, las plantas restantes reiniciarán gradualmente su actividad.