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Covestro ha cumplido sus previsiones de ebitda para el primer trimestre de 2020 en un entorno comercial fuertemente afectado por el coronavirus, han asegurado los responsables de la multinacional.
De esta forma, los volúmenes básicos disminuyeron un 4,1 % en comparación con el trimestre del año anterior. Esto se debe, sobre todo, a una demanda considerablemente más débil en China, como consecuencia de las interrupciones de la producción por el coronavirus de clientes locales en febrero y marzo de 2020. Esto, junto con un descenso de los precios de venta en todo el mundo, impulsado principalmente por el aumento de la presión competitiva en los segmentos de poliuretanos y policarbonatos, ha comportado un descenso de las ventas del grupo de alrededor de 2.800 millones de euros (-12,3 %) El ebitda se ha situado en 254 millones de euros (-42,5 %), nivel previsto para el primer trimestre. El resultado neto cayó a 20 millones de euros (-88,8 %). El flujo de efectivo libre operativo (FOCF), de menos 249 millones de euros, se sitúa a niveles negativos, tal y como se preveía.
Para el año fiscal 2020, Covestro prevé un crecimiento de los volúmenes básicos inferior al del año anterior. Se espera que el FOCF descienda y se sitúe entre menos 200 millones y 300 millones de euros, y la rentabilidad del capital empleado (ROCE) llegue a entre -1 % y 4 %. Se prevé que el ebitda se sitúe entre 700 millones y 1.200 millones de euros. Además del programa existente de eficiencia y eficacia que se puso en marcha en octubre de 2018, Covestro ha aumentado el objetivo de ahorros adicionales de costes a corto plazo en otros 100 millones de euros, hasta alcanzar 300 millones de euros para el actual ejercicio económico. Las inversiones actuales se están reduciendo en unos 200 millones de euros, con lo que el total de inversiones asciende a unos 700 millones de euros.
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