Empresas Premium
El patronato de FLACEMA, la Fundación Laboral Andaluza del Cemento y el Medio Ambiente (FLACEMA), ha elegido como presidente a Isidoro Miranda, primer ejecutivo de la compañía cementera LafargeHolcim en España.
Miranda sustituye en el cargo a Pedro Carranza, CEO de Cementos Portland Valderrivas, que accedió al cargo en junio de 2019. Según manifiestan desde Flacema, Carranza se mantendrá vinculado a la Comisión Ejecutiva de FLACEMA.
Isidoro Miranda es Doctor Ingeniero Industrial por la Universidad de Navarra, cuenta con un MBA por la Escuela de Negocios INSEAD (Francia) y ha sido profesor visitante de la Universidad de Stanford (EEUU). Inició su trayectoria profesional en Lafarge en 1995 como director de Estudios Estratégicos del Grupo. En 1998 fue nombrado director general de Lafarge Asland en España. Desde 2012 ha ocupado los cargos de director general de Lafarge España y Ecuador, y director general adjunto del Grupo Lafarge, así como presidente de Oficemen, patronal cementera. En 2015 Isidoro Miranda fue nombrado director general de LafargeHolcim España. En junio de 2019 fue nombrado vicepresidente de Cembureau, patronal cementera europea.
Según Miranda, el desplome en el sector cementero que ha tenido lugar en España y en Andalucía como consecuencia del COVID-19, requiere una apuesta decidida de todos y la valorización se presenta como un elemento clave si deseamos que nuestra industria pueda mantener su actividad.
Y como afirma el director general de Flacema, Manuel Parejo, la UE considera esta práctica dentro de las Mejores Técnicas Disponibles (MTDs) en la fabricación de cemento, además de completamente segura. Por otro lado, la valorización contribuye claramente a paliar el grave problema que presenta Andalucía con la acumulación de residuos en vertederos, que lo aleja de los objetivos de vertido impuestos por Europa. Con la valorización energética -indica Parejo- además de reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEIs), se aporta competitividad a la industria. Esta mayor competitividad resulta clave para posibilitar la exportación de cemento de las fábricas andaluzas, garantizando su actividad a largo plazo y el mantenimiento del empleo de calidad que generan, añade.