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La compañía Covestro iniciará la producción de sosa cáustica partir del segundo semestre del 2022, gracias a la nueva planta de cloro de Tarragona que actualmente se encuentra en una avanzada fase de construcción, y que contará con la pionera tecnología del cátodo despolarizado con oxígeno (ODC).
Carlos Nebot, director de Química Básica de Covestro en España
Se trata de una innovación desarrollada y patentada por Covestro que permite la producción de cloro y sosa cáustica a partir de sal de roca, consumiendo alrededor de un 25 % energía menos que el método convencional.
En paralelo, la empresa ha preparado las instalaciones logísticas adecuadas en el Puerto de Tarragona para asegurar el suministro de esta materia a sus clientes en el país. Dichas instalaciones, que ya están siendo utilizadas en la campaña de premarketing, sirven como punto de partida y de distribución, garantizando la disponibilidad de este material en todo momento.
El mercado de la sosa cáustica no es nuevo para Covestro. La compañía ya cuenta con plantas de producción en Europa que abastecen a las instalaciones logísticas en Tarragona, desde las cuales se atiende actualmente a los clientes en España hasta que la planta de cloro de Tarragona entre en funcionamiento.
La sosa cáustica (hidróxido de sodio) se utiliza como base química para la fabricación de soluciones de tratamiento de aguas, industria del papel y productos de limpieza de uso doméstico e industrial, como por ejemplo detergentes, jabones, desinfectantes y desatascantes, etc.
Para Carlos Nebot, director de Química Básica de Covestro en España, “la sosa cáustica es una materia prima altamente versátil por su variedad de aplicaciones y esencial para la industria y la sociedad, como ha quedado evidenciado en el contexto actual de pandemia. Con la nueva planta de cloro de Tarragona, no solo ampliamos nuestro portfolio de productos esenciales que contribuyen a la salud y seguridad de las personas, sino que también damos continuidad a nuestros clientes nacionales mediante una producción propia y una distribución flexible y sostenible que reduce la huella de carbono asociada a su transporte”.
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